El sol es una fuente de energía renovable gratuita, inagotable y no contaminante ya que no produce gases de efecto invernadero. Los sistemas de calefacción solar proponen diseños y equipos que permiten el aprovechamiento de la radiación solar para convertirla en energía eléctrica o térmica, con capacidad de satisfacer o reducir la demanda energética de calefacción de una vivienda o edificio. En ITC somos expertos en ingeniería térmica y climática, si necesitas asesoramiento sobre este tema ¡no dudes en llamarnos!
Teniendo en cuenta que el consumo promedio de energía para calefacción en una vivienda española se sitúa, de media, entre los 5.000-7.000 kWh al año, tan sólo con 4m2 de captación máxima (rendimiento 100%) de la radiación solar podríamos satisfacer la demanda energética de calefacción.
Sin embargo, ninguna tecnología es capaz de transformar el 100% de la energía solar en energía térmica. Por el contrario, la eficiencia de conversión es bastante baja. Los paneles solares fotovoltaicos rondan el 15-20% de rendimiento, mientras que en los captadores solares térmicos la cifra se puede aumentar hasta al 25-60% en función de las condiciones climatológicas exteriores. Aún así, compensa aprovechar todo el potencial del sol.
¿Qué tecnologías existen para convertir la radiación solar en calefacción?
Arquitectura bioclimática solar pasiva
Este tipo de arquitectura pretende optimizar la capacidad térmica de los materiales de construcción, así como otros parámetros de diseño (orientación, sombras…) para reducir la demanda energética de calefacción.
Se trata de una tecnología pasiva porque no requiere de ningún equipo o instalación para aprovechar la radiación del sol y aumentar la cantidad de radiación solar aprovechada por el edificio.
Instalaciones de captación solar térmica
Las instalaciones solares térmicas funcionan con colectores solares por los que circula un líquido (normalmente agua con glicol) que absorben el calor del sol para producir altas temperaturas en su interior. Este líquido caliente (normalmente a unos 70-75ºC) se desplaza por un circuito primario cerrado hasta un acumulador de inercia mediante bombas de circulación. Este acumulador de energía es, por tanto, el depósito de agua caliente que será utilizado como apoyo para calentar el local.
Instalaciones fotovoltaicas
Las instalaciones fotovoltaicas transforman la energía solar en energía eléctrica gracias al efecto fotoeléctrico, para después volver a transformarla en energía térmica. La energía eléctrica que se genera con ellas puede ser empleada para la instalación eléctrica general de la vivienda, así como para otros usos específicos como el de los equipos eléctricos destinados a la calefacción (bomba de calor o radiador eléctrico, por ejemplo).
Tecnología solar mixta
Se basa en combinar algún tipo de diseño pasivo (arquitectura bioclimática) con otra de base activa (solar térmica o solar fotovoltaica).