Gestionar los residuos de forma eficiente es esencial para evitar sanciones y contribuir a la sostenibilidad ambiental. Esto requiere un estricto cumplimiento de los procedimientos administrativos y técnicos, seguir las normativas vigentes, y contar con un gestor autorizado. A continuación, te explicamos los aspectos más importantes sobre la gestión de este tipo de residuos, y si necesitas ayuda no dudes en contactar con los profesionales de ITC…¡Somos instaladores autorizados!
Cuando cualquier refrigerante se recupera de una instalación frigorífica para su reciclaje, siempre está mezclado con aceites y en muchas ocasiones arrastra humedad e incondensables.
El reciclaje de gases refrigerantes consiste fundamentalmente en separarle el aceite, la humedad y los incondensables, y las partículas extrañas que puede tener el refrigerante. Sin embargo, en el proceso de regeneración se realiza una la limpieza profesional de aceite, niveles de humedad y otras impurezas; asegurando que el balance de los refrigerantes regenerados sea idéntico al original, según los estándares de calidad.
Tras realizar el reciclaje del gas refrigerante, el gestor de residuos debe hacer un análisis, generalmente en cromatografía gaseosa, para garantizar la calidad del gas resultante. Sin este análisis es muy difícil diferenciar un refrigerante puro de uno reciclado.
El instalador debe inscribirse como productor de residuos en la Consejería de Medio Ambiente (o Delegaciones Territoriales) de su Comunidad Autónoma. Además, todo instalador está obligado según Real Decreto 115/2017, por el que se regula la comercialización y manipulación de gases fluorados y equipos basados en los mismos, a disponer de un contrato en vigor con el gestor que asegure la recogida periódica de los residuos generados en sus instalaciones en el desarrollo de su actividad, así como de una contabilidad actualizada de las cantidades de residuos generadas.
¿Cómo gestionar correctamente los residuos de los gases refrigerantes?
- Antes de iniciar cualquier procedimiento de envío de residuos, es obligatorio formalizar un contrato de gestión de residuos con un gestor autorizado que cumpla con la normativa vigente.
- El gestor autorizado debe realizar una notificación previa a la administración correspondiente antes de proceder al traslado de los residuos. Esta notificación es obligatoria y permite un control administrativo del flujo de residuos.
- El gestor suministra al cliente los envases adecuados para la recolección de los residuos. Estos envases suelen venir sellados al vacío y con válvulas precintadas, asegurando la seguridad durante el almacenamiento y transporte. Además, cada envase debe estar correctamente identificado con etiquetas que especifiquen el tipo de residuo que contiene. Estas etiquetas deben cumplir con las normativas de transporte de mercancías peligrosas (ADR).
- Una vez recolectado el residuo en los envases adecuados, se procede a su traslado mediante un transportista autorizado.
- Cuando el gestor recibe el residuo, realiza un análisis para determinar su composición y el destino final.
- Tras la correcta gestión del residuo, el gestor debe entregar al productor los siguientes documentos:
- Certificado de gestión del residuo, que acredita su correcto tratamiento.
- Certificado de regeneración (en caso de residuos reciclables).
- Listado detallado de envases recibidos, indicando la cantidad de residuo gestionado y su destino (regeneración o destrucción).
¿Cuánto tiempo deben almacenarse los residuos de gases refrigerantes?
Depende del tipo de residuo y la normativa aplicable, pero en términos generales los residuos peligrosos se deben enviar a un gestor autorizado en un plazo máximo de 6 meses desde su generación; mientras que los residuos no peligrosos pueden almacenarse hasta 2 años, dependiendo de la legislación autonómica.
En cualquier caso, el incumplimiento de estos plazos puede conllevar sanciones administrativas.